Le dibujaba un mundo real no uno color de rosa,
pero ella prefería escuchar mentiras piadosas.
pero ella prefería escuchar mentiras piadosas.
Las amo tanto locas, qué sería de mi sin ustedes?
no se puede cambiar de
corazón como de camisa
sin perder la sonrisa.
no se puede cambiar de
corazón como de sombrero
sin haber sufrido primero
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